Morón tiene, como en muchos otros municipios, más de un sindicato con derecho a representar a los trabajadores municipales, que en general, optan entre el que se encuentra comprendido por la Federación de Sindicatos de Trabajadores Municipales que conduce Oscar Ruggero; la Federación que comanda Rubén "Cholo" García o ATE.
Sin embargo, para Tagliaferro, el sindicato que a nivel local conduce Luis Duré, no existe. O al menos eso pareciera ya que ni siquiera se lo convoca para los acuerdos paritarios tal como indica la legislación que debe hacer, y por eso es que desde el gremio no sólo rechazan la oferta del ex marido de María Eugenia Vidal, sino que también advierten que comete un "acto ilegal" y podría incluso derivar en una denuncia por incumplimiento de los deberes de funcionario público.
En este marco, el propio Duré envió una carta al Jefe comunal donde "repudia la actitud ilegal y manifiestamente antisindical" mediante la cual se suscribió el convenio colectivo en una primera etapa y el acuerdo salarial luego, para cuya negociación se excluyó de manera arbitraria a la entidad que representa Duré.
"Desde el sindicato rechazamos el aumento del 10% pagadero retroactivo al mes de marzo y el 8% en agosto", sostiene esa misma carta en referencia al aumento en teoría "acordado" por el municipio de Morón que no sólo ofrece apenas un 18 por ciento, muy por debajo de la inflación pasada e incluso de la proyectada, sino que además lo desdobla.
Además, la entidad gremial rechazó también el acta acuerdo, que consideran viola la ley provincial 14.656 y las disposiciones del Ministerio de Trabajo de la provincia, por lo que solicitaron la nulidad de ese acuerdo.
"Intimo convoque a esta entidad a fin de formar parte de la comisión negociadora cumpliendo de esta manera lo dictaminado por la Dirección de Relaciones Laborales del sector Público y lo dispuesto por el Decreto Reglamentario 784/16 suscripto por la señora Gobernadora de la provincia de Buenos Aires", reclama Duré en su misiva a Tagliaferro, al tiempo que le pide a Mónica Souza, la titular del área de relaciones Laborales de la provincia su intervención en el conflicto.
Duré le pide, además, que se aplique "el mismo criterio" que esa cartera "fundamentó que los sindicatos de UPCN en el Partido de Saladillo y la Asociación de Municipales ASTMM en Moreno se encontraban habilitadas para participar de las negociaciones colectivas".
Cabe destacar que incluso ante la conciliación convocada oportunamente por el Ministerio de Trabajo provincial, quedó asentado en el acta que el pedido del sindicato de formar parte de las negociaciones salariales se ampara en el artículo 52 del Decreto antes mencionado, y que el sindicato reúne los requisitos allí exigidos, porque además, está adherido a la Federación y cuenta con más del 10% de afiliados que es el piso mínimo requerido, pese a lo cual Tagliaferro insiste con desconocerlos como interlocutores válidos.
El argumento del Intendente de Morón es que "sólo está obligado a negociar con las entidades gremiales que cuentan con personería jurídica", desconociendo de esta manera lo estipulado en la Ley 14.656 y el Decreto que curiosamente lleva la firma de su ex mujer, la mandataria provincial.
Esto mismo quedó planteado en una reunión de Conciliación que se llevó a cabo en la sede de la cartera laboral en La Plata el 7 de abril, en la que se pidió una resolución al respecto y desde el sindicato dejaron planteada la posibilidad de recurrir a la justicia si esto no ocurre.
Todo esto se da, además, en el marco de varias denuncias que salpican a Ramiro Tagliaferro y concejales de su entorno cercano, por el pedido de "retornos" de parte de los sueldos que corresponden en realidad, a trabajadores municipales. Por uno de esos casos tuvo que renunciar el concejal Salinas, pero éste podría ser apenas la punta de un ovillo mucho más largo aun.
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